En sus primeros meses el tacto es la única forma que tienen los bebés para comunicarse. Con el paso del tiempo logran hacerse entender por otros medios, pero el contacto físico con ellos es siempre una forma instintiva que tienen los padres para calmarlos, hacerlos sentir cómodos y protegidos.

Además de ser una forma de expresar cariño y contención, los masajes tienen variados beneficios en los bebés, tanto en su desarrollo emocional como físico y aquí te contamos algunos de ellos:

• Apego: el masaje estimula el vínculo positivo entre los padres y el bebé en una etapa temprana. Pasar tiempo íntimo uno a uno con tu pequeño te puede ayudar a que se conozcan más y mejorar la comunicación no verbal.

• Confianza: estos espacios de tiempo ayudan a conectar de una forma más íntima a los pequeños con sus padres y a su vez a éstos a reconocer mejor sus necesidades. También es una gran forma para que otros miembros de la familia y los cuidadores establezcan lazos afectivos con el bebé.

• Salud: algunos de los beneficios fisiológicos de los masajes son mejorar la respiración del bebé así como también de su función gastrointestinal. Además activan el sistema inmunológico y circulatorio.

• Calmante: el masaje es analgésico para el sistema nervioso y es excelente para aliviar los cólicos y mejorar el sueño. Eleva los niveles de la oxitocina, tanto en los padres como en su bebé, ayudándoles a ambos a sentirse más tranquilos y relajados.

• Relajante: ¿a quién no le gusta que le hagan un masaje?. Además de tener un efecto calmante, con los masajes la respiración de tu bebé se hace más profunda.

• Alivio: Así como ayuda a mejorar la salud, los masajes también pueden ser muy útiles al momento de necesitar aliviar los cólicos, el estreñimiento o los gases.

 Ya sabes, los masajes son muy positivos tanto para ti como para tus hijos y después de un rico baño con los productos que BabyLee tiene para ellos, pueden ser una instancia perfecta para estrechar su relación.